PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS
Si echamos un vistazo al American Staffordshire Terrier nos daremos cuenta de la increíble
fortaleza de su cuello y mandíbulas; así como de la resistente piel que posee. Todo ello
características de una raza de constitución compacta, cuya rasgo más definitorio es su
fortaleza física y mental.
Con una longevidad de entre 12 y 16 años, y una altura de unos 45 cm, esta raza manifiesta
en sus proporciones musculosas y cuadradas, su capacidad de lucha y superación. Y es que,
si algo lo caracteriza es su carácter incansable, la confianza en sí mismo, y la protección
y compañía que es capaz de ejercer.
Su denominación de Perro Potencialmente Peligroso, no es más que un injusto nombre a su
instinto de responder al reto de los demás y defender a sus aliados en caso de peligro.
Lejos de ese supuesto carácter que el nombre de PPP le otorga, es un perro tranquilo,
complejo y afable con quien le rodea, cuya educación y modales depende del dueño y no de
la raza.
Sin duda, versátil es el adjetivo que más se ajusta a sus características.
El American Staffords Terrier surge del cruce entre el Old English Bulldog y el English Bull
Terrier. Sus inicios se ligan a Inglaterra, donde fueron criados para la lucha en rings y
otras prácticas deplorables. La necesidad de aumentar la resistencia para sobrevivir a estos
“juegos”, produjo la disminución de su tamaño, adquiriendo la denominación de Pit Dogs.
Mientras las emigraciones a América supusieron su cruce con otras razas, en Inglaterra acaba
convirtiéndose en el Staffordshire Terrier, donde sus características físicas supusieron el
abandono de las prácticas de lucha, y el comienzo de la preocupación por su belleza canina.
La afabilidad de esta raza le lleva a ser empleado en terapias para la rehabilitación e
interacción con enfermos y ancianos. ¡Su capacidad de mantener la calma supone un componente
perfecto para estos pacientes!
Además, se emplea en servicios como la policía y el rescate, siendo infalible en la
localización de drogas o personas desaparecidas.
CUIDADOS BÁSICOS Y ALIMENTACIÓN
Para cumplir las expectativas de desarrollo comentadas anteriormente, la alimentación es muy
relevante. En el caso de animales como el American Staffordshire Terrier el equilibrio entre
alimentos proteicos y energéticos le permitirá un crecimiento adecuado. Para ello, se estima
que unos 380 g de alimento completo seco es la dosis diaria recomendada.
Al ser un perro fuerte y resistente soporta adecuadamente el fío y el calor; pese a ello, y
al igual que todos los perros de pelo corto, sufre con las temperaturas bajas.
Su constitución y genética le llevan a estar en movimiento constantemente, calmar su
necesidad de ejercicio mediante juegos o deporte puede ayudarte a reforzar los vínculos y
proporcionarle la dosis diaria de actividad que necesita.
Es más, puesto que requiere de ejercicio diario, si reside en una casa pequeña, salir a dar
caminatas o correr puede ayudarle a la adaptación a estos lugares.
Como todos los perros que históricamente se dedicaron a la vigilancia y la lucha, el American
Staffordshire Terrier goza de un estado de salud muy resistente. Sin embargo, las afectaciones
más comunes son los problemas de corazón, las cataratas y la displasia de cadera (desarrollo
anormal de las articulaciones de cadera)
Es importante también cuidar las posibles infecciones y riesgos relativos a caídas accidentes.
Además, asegúrate de realizar visitas al veterinario cuando sea necesario, y consulta el
calendario de vacunas para prevenir posibles riesgos.
Un cepillo de puntas blandas para el cepillado semanal y un baño cada mes o mes y medio, permite
que tu perro luzca sano y limpio diariamente. Su pelaje te permitirá manejarlo con facilidad,
por lo que el mantenimiento de su belleza no te requerirá de excesivo tiempo. No olvides tampoco
la atención de los ojos, dientes orejas, pies y uñas.
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