PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS
Entre los perros de gran tamaño y belleza destaca sin duda, el Pastor Alemán. Esta raza de unos 60 cm de altura y de más largo que alto, ha sido uno de los grandes amigos del hombre desde la antigüedad. El Pastor Alemán es robusto y musculado, con un pelaje de doble capa: la externa le permite la resistencia al agua; mientras que la interna, densa y sueva, permite retener el calor. La longitud y el color del pelo varían de unos ejemplares a otros, aunque siempre se caracteriza por su densidad y dureza.
Su promedio de vida de unos 13 años, su mandíbula robusta y su popularidad con respecto al resto de caninos son otras de sus características.
En cuanto a su carácter destaca su resistencia y fiabilidad. Si a eso le sumamos su instinto de protección y vigilancia, entendemos por qué ha sido tradicionalmente empleado en servicios militares, policiales y en la ayuda de personas dependientes.
La fidelidad a su dueño llega hasta puntos insospechados. De este modo, la confianza en los demás humanos y perros depende en gran medida de la actitud que adopte su dueño hacia ellos. Como podéis comprobar, la fidelidad que tiene hacia su propietario es infinita.
La socialización y la educación desde pequeños determinarán el adiestramiento futuro. No olvides aprovechar su genética y características para hacer de tu pastor alemán un perro completo y educado.
Transcurría el siglo XIX cuando un capitán de caballería llamado Stephanitz tomó la iniciativa alemana de búsqueda de una raza especialmente útil para la protección de los rebaños. Así, quedó sorprendido por un pastor alemán y fundó junto con Meyer el primer club de la raza: el Verein für Deutsche Schäferhunde (SV).
Pronto descubrieron sus facultades, lo que le llevó a ejecutar trabajos como cuidador de ganado y posteriormente, a ser fundamental en trabajos militares, de la policía y en el servicio a personas dependientes. Incluso, se ha demostrado su utilidad en el servicio en Guerras y en la actualidad, es una de las razas de perro más queridas.
Su capacidad de exploración es tan grande que es capaz de detectar la presencia de enemigos o personas a 250 metros de distancia. Lo que les ha llevado a ser los grandes protagonistas en la detección de drogas, bombas y persecución de delincuentes.
Además, ¡los servicios prestados hacen que tengan un especial reconocimiento a nivel mundial!
CUIDADOS BÁSICOS Y ALIMENTACIÓN
El hecho de que el Pastor Alemán acostumbre a estar en movimiento y gastar energía requiere proporcionarle una alimentación completa. Ahora bien, esta raza tiene un estómago pequeño en relación con su tamaño, por lo que no debe abusarse de las raciones suministradas.
Por ello, lo ideal es darle de comer tres veces al día si son cachorros, y dos en caso de perros adultos (de 500 a 650 gramos diarios de alimento completo seco).
Entre el tipo de comida se recomiendan los piensos balanceados y los alimentos en lata. Su consumo le asegurará contar con los nutrientes que necesita y una gran variedad de texturas y sabores.
Las distintas funcionalidades, su versatilidad y su instinto de protección, no son sino conductas que evidencian su necesidad de actividad. Si tienes un Pastor Alemán no subestimes la necesidad de ejercicio, ya que además de mantenerle sano, le ayuda a sentir que tiene un objetivo.
Los fines comerciales desde la antigüedad, le han convertido en un perro susceptible a distintas enfermedades. Entre ellas, destacan la displasia de cadera y de codo, la epilepsia y el reumatismo.
Además, son comunes la miastenia (una enfermedad de transmisión neuromuscular que produce debilidad muscular), la osteodistrofia (que afecta a las extremidades delanteras de los cachorros) y la osteocondrosis (en la que se originan regiones anormalmente espesas del cartílago que son menos resistentes a la tensión mecánica).
Igualmente, se recomienda atender especialmente a los cuidados dermatológicos para evitar el daño de pulgas y garrapatas.
Aunque las enfermedades comunes en Pastores Alemanes parezcan numerosas, su capacidad de enfrentarlas también lo es. No olvides que las labores de servicio a las que están destinados los han convertido en grandes luchadores.
No te dejes asustar por los numerosos periodos de muda (especialmente en primavera y otoño)…aunque el cepillado frecuente sea recomendable, es fácil y ligero.
Además, no olvides emplear un champú hipoalergénico durante el baño, y cuidado con exceder la frecuencia de los mismos, ya que puede dañar la protección natural del pelo.
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