Un seguro para cámper protege el vehículo y a sus ocupantes frente a diferentes imprevistos. Entre las coberturas habituales están la responsabilidad civil obligatoria, daños propios, asistencia en carretera y cobertura frente a robo o incendio. Además, se pueden incluir coberturas adicionales para accesorios instalados y bienes personales transportados en el interior. Algunas aseguradoras también ofrecen protección contra vandalismo o daños intencionados, así como cobertura para cristales laterales y claraboyas.