No. En España, cualquier embarcación con motor debe tener un seguro de embarcaciones con cobertura de responsabilidad civil obligatoria. Navegar sin él puede conllevar sanciones económicas importantes, la prohibición de entrada o permanencia en puertos deportivos, responsabilidad legal personal en caso de accidente, incluyendo daños a terceros.
Además, si ocurre un siniestro y no tienes seguro, el propietario y el patrón deberán asumir personalmente todos los gastos y daños ocasionados. La embarcación puede incluso ser utilizada como garantía de pago.