PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS
La planta y las características físicas de este perro intimidan a cualquiera. Su musculatura evidente y su pelaje corto son dos características únicas que sustenta. Posee una cabeza ovalada, con frente plana de oreja a oreja y unos ojos con forma triangular. Su peso y su estatura no están marcados por unos límites. Hablamos de un perro de tamaño mediano que puede verse en varios colores: blanco, negro atigrado, rojo, leonado y tricolor.
Tiene un carácter equilibrado. Debe aprender a obedecer órdenes. Es un can gentil con las personas, inteligente, valiente e incondicionalmente leal con su dueño. No es un perro indicado para principiantes, puesto que exige mucho tiempo para ser adiestrado.
En la actualidad, el bull terrier es un perro familiar que se caracteriza por ser un buen compañero de juego con los más pequeños. A pesar de ello, la enorme fuerza del animal nos impide dejar a los niños solos con el perro. Son animales que necesitan estar acompañados, por lo que no es bueno dejarlos solos durante mucho tiempo.
En la Edad Media, los ancestros de esta raza eran empleados en peleas de perros contra toros. Siglos más tarde, James Hinks presentó en Inglaterra a esta raza en 1850, tras haber cruzado al extinto English White Terrier con perros bull y terrier. Su objetivo era crear un perro que, además de estar capacitado para la pelea, tuviera un aspecto bonito.
Diez años después, el bull y terrier se dividió en dos ramas: el bull terrier blanco puro y las variedades de color que frecuentaron las peleas de perros. Antes de llegar a la categoría actual que tiene de “perro de compañía”, esta raza ha pasado por varias etapas, la más conocida, aquella en la que era utilizado como perro de peleas. Sin embargo, sustentó otras funciones. En África, por ejemplo, fue empleado como perro policía y como perro de caza mayor por ser resistente a los climas tropicales.
Como ya hemos apuntado, el bull terrier es un animal al que no le gusta la soledad durante muchas horas. En el caso de hacerlo, atente a las consecuencias, puesto que suelen generar numerosos destrozos en los hogares. Otra curiosidad de este tipo de perro es que, en algunas zonas del mundo, es conocido como “el caballero blanco”.
CUIDADOS BÁSICOS Y ALIMENTACIÓN
La alimentación de este tipo de perro dependerá, obviamente, del peso y de la estatura del mismo. Cuando son cachorros, la alimentación que necesita esta raza es muy específica, por ello, se recomienda emplear pienso especializados para bull terrier.
Debes equilibrar la cantidad de comida con el ejercicio llevado a cabo por el animal, de lo contrario, la obesidad no tardará en hacerse manifiesta en él. En cuanto a la hidratación, es clave que siempre estén bien hidratados. Siempre debe haber uno o más boles destinados a saciar la sed del animal con agua.
Se trata de un perro que exige que tanto su cuerpo como su mente se encuentren activos. Por este motivo, es una raza que necesita correr y hacer ejercicio físico diariamente. Los paseos deben de ser enérgicos y activos, de tal forma que pueda ejercitar la musculatura. Solo de esta forma el peso del animal estará equilibrado y evitará numerosos problemas cardiovasculares.
Su forma de ser no encaja con la dinámica de estar encerrado durante horas prolongadas, así que ten en cuenta que no es un perro nada casero.
Esta imponente raza tiene una esperanza de vida de unos 10 años. Nada más nacer, los cachorros deben pasar una revisión por si sufren sordera. Esta discapacidad se produce, sobre todo, en los perros de color blanco (la padecen un 20% de los canes).
Esta raza también es propensa a desarrollar alergias en la piel. Picaduras de insectos e, incluso, la alimentación pueden ocasionar en el animal una reacción alérgica de urticaria, erupción y dermatitis aguda. Para evitar esto, te recomendamos que mantengas al perro alejado de insectos y plantas, además de que siga una dieta basada en pescado.
Aparte de lo comentado, los bull terrier tienden a padecer problemas de salud tales como: luxaciones de rótula, problemas renales y problemas del corazón. Por último, puede manifestar comportamientos compulsivos –por ejemplo, persiguiéndose el rabo- que deriven en la automutilación.
Las características físicas y el pelaje del animal no perjudican para nada la higiene del mismo. Es un can que deja menos pelos en sofás, sillas, camas y suelo que otros con un pelaje más denso. El lavado no exige mayores complicaciones y los cepillados suaves entre días, mantendrán el pelo del animal limpio.
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